Quiénes Somos

Hoy empieza esta aventura que hemos decidido compartir con ustedes y que pretende hacer del cocinar una experiencia divertida, fresca y relajante. Para nosotras será una oportunidad para seguir conociéndonos, experimentando y disfrutando de buenos momentos juntas.

Solo podemos culpar al destino por habernos juntado (como dice el refrán: “Dios los cría y el viento los amontona”), pero ha sido este hecho afortunado y maravilloso el que ha dado pie a esta locura.

En este viaje Susana será la encargada de enseñarnos a amar este arte milenario, a cocinar como lo hacían nuestras madres y abuelas, a encontrarle “el gustillo” a esto de vestir un delantal y bailar entre cacerolas, especias, olores, sabores, colores y sentidos. Maestra paciente y generosa como pocas, amiga como no hay muchas, esta pamplonesa a la que no hay toro que la pille.






De las fotos y algunas de las entradas de este blog será responsable nuestra super eficiente chica de Móstoles, Sandra. Una gran escritora que se atreve ahora a entrar en el misterioso y a veces “acojonante” mundo de la cocina, poniendo lo mejor de sí y ese sentido del humor que la caracteriza y la hace irrepetible. Aún no la hemos visto con el delantal puesto pero sí con la servilleta al cuello, lista para aprobar (o no) los platos que se le sirvan.





Y por último quien escribe estas líneas, Viki, una argentina aventurera, a la que vientos no demasiado fuertes, trajeron a un Madrid de encanto y buena gente. Seguramente me tocará tomar apuntes, hacer algún que otro chiste y fregar los cacharros, pero sobre todo hacer las paces con la cocina y la comida. Será un aprendizaje, un volver a disfrutar de los millones de sabores, colores y  texturas que se nos revelan cuando destapamos una olla.




Un proyecto que nos ilusiona, pero principalmente nos divierte y relaja. Y eso es lo mágico y memorable de este viaje: el poder hacerlo con amigas y que además puedan acompañarnos a través de este blog todos aquellos a los que queremos y para los que también estamos guisando.


Así que lector/a toma asiento y disponte a disfrutar de uno de los mayores placeres de esta vida: comer, pero comer bien.

Madrid, 9 de Noviembre de 2011

“Tener amigos con quien compartir una buena comida es magnífico, pero es mucho mejor tener a alguien que te friegue luego los platos.”
Anónimo